Por: Enrique Rivas L.

Atrás quedaron aquellos tiempos en los cuales las láminas de imágenes eran parte de nuestros trabajos.

Internet revolucionó la vida de todas las personas, y lo sigue haciendo. La primera vez que utilicé este medio, a escasos 10 años, fue una aventura entre abrir una cuenta de correo electrónico y descubrir el famoso programa, Messenger.

Antes había que buscar en un catálogo bibliográfico la información que se necesitaba. Eso para muchos, quedó atrás… ahora solo se necesitan 6 letras: Google. Y es que este gigante de las búsquedas le facilitaría en 0.15 segundos el encontrar lo que uno desee en un solo clic.

El mundo se revolucionó en el momento de percatarse que las fotos no solo tenían que estar en papel. Y es que ¿quién no abrió su cuenta de Hi5? Esta empresa, la cual dio sus primeros indicios de una gran red social en Latinoamérica, atrajo a todas las personas. En ese momento, lo más “top” era comentar en la web, buscar dibujos para el perfil y agregar a muchos “amigos”, sin ni siquiera, en muchos casos, conocerlos.

Pero no todo quedó ahí, las nuevas tecnologías iban dejando botados a casi todas las personas. Así fueron apareciendo

nuevos programas, nuevos formatos y nuevos productos. Un centenar de medios incursionaron en integrar sus ediciones a la web, tanto que ahora muchas personas revisan el RSS, su Twitter o el Facebook para enterarse de toda la información.

Con la incursión de estas nuevas redes sociales también evolucionó la forma de vender. Quién no recuerda estar caminando por plena Avenida Segunda y por cada 20 pasos que se dieran a uno le ofrecían 15 tipos de papales diferentes con información de alguna empresa. Ahora esta publicidad, aunque se sigue haciendo, quedó “out” para los mercadólogos.

En la actualidad uno recibe en el correo electrónico una cantidad de publicidad (SPAM) inimaginable. Se crearon perfiles de empresas, implementaron los “Fan Page” y la comunicación dio un giro rotundo. La empresa ahora le habla. Así como lo leyó,  la comunicación bidireccional, empresa – cliente, fue implementada rápidamente, donde las empresas recibían  gran retroalimentación y los usuarios respuestas de sus marcas.

Es así como cambió la forma de recibir la información y el estilo de vida de las personas,  de ir a comprar el periódico o buscar recortes de dibujos en revistas para tareas, ahora todo se encuentra en un mundo virtual. Creando perfiles, comentando fotos, dando una opinión en blogs, ingresando a miles de URL y llevando el internet hasta en el teléfono celular.

Tanto así que, antes cuando la gente tenía alguna tarea debía  buscar la forma de encontrar las respuestas para realizarla. Ahora, en un solo clic la profesora le responde y comenta al respecto.